Con la llegada del invierno, el
alcaudón real, baja un poco la guardia en cuanto a desconfianza se
refiere, y es en esta época cuando con mas facilidad, podemos
acercarnos a el.
Casi siempre lo encontraremos en
parejas aisladas, manteniendo un territorio con varios posaderos
donde lo podremos ver pasar mucho tiempo a la espera de comida. El
gran pico y las descompensadas garras para su tamaño, nos indican
que es un cazador, su alimentación la componen insectos grandotes,
lagartijas, ratoncillos, incluso algunas aves pequeñas. Si hace un
tiempo hablábamos de que el estornino es un gran imitador, el
alcaudón real, también es fácil escucharlo imitar al carbonero
común, al jilguero o al verderón pero claro esta, con un fin mucho
mas siniestro, los atrae para después comérselos. Por esto y porque
suele pinchar a sus victimas en alambradas o zarzales para poder
descuartizarlas mejor, es conocido en el mundillo ornitológico, como
el carnicero o empalador. Si alguna vez encontráis una alambrada
llena de animalillos pinchados, no penséis que allí alguien hace
vudú, el culpable, es este personaje.
1 comentario:
Me fascina este animal y su comportamiento.
Un saludo!!
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